Estudios científicos han demostrado que existe una relación clara entre la práctica de una actividad física y la disminución de riesgo de desarrollar un cáncer de mama, entre un 20 y un 40%.
La actividad física reduce los niveles de hormonas femeninas en sangre además de la producción y almacenamiento de estrógeno en el tejido adiposo. Esto disminuye el riesgo de tener cáncer mamario y otros tipos de cáncer relacionados con las hormonas femeninas.
Para prevenir el desarrollo del cáncer de mama es especialmete importante practicar actividad física regularmente durante la pubertad, cuando se están desarollando los pechos, y después de la menopausia cuando la probabilidad de tener cáncer de mama es mayor.
No podemos olvidar que existen otros factores aparte de la actividad fisica que pueden disminuir este riesgo: gestación antes de cumplir 25 años, tener varios hijos, lactancia, pauta de alimentación equilibrada.
La parte más importante para prevenir y descubrir cáncer de mama es hacerse una autoexploración mínimo una vez cada mes, siempre en el mismo momento de tu ciclo menstrual, preferentemente justo al terminar la regla.